Vida y Asedios de una pequeña gran ciudad
GENERAL PETER ADAMSON
(Dundee 23 Sept. 1779 – Erindale 1865)
En una pequeña localidad de Ontario (Canadá) llamada Mississauga, cercana a Toronto, existe una calle en honor a este general británico, que casualmente es uno de los veteranos que participaron en la toma y destrucción de San Sebastián en 1813.
La historia militar de este escocés comienza el 12 de julio de 1800, cuando llega con rango de alférez al 71º regimiento de infantería de línea con 21 años. Al año siguiente es ascendido a teniente, y a capitán en 1808, graduación con la que participó en la Campaña Peninsular. Una vez terminada esta, será ascendido a mayor en 1816 y mayor general en 1817.
Durante la campaña Peninsular a las órdenes de Sir Arthur Wellesley, futuro Duque de Wellington, fue destinado a servir en el ejército portugués. Estas unidades fueron formadas y mandadas por oficiales británicos y portugueses, durante toda la contienda.
Adamson sirvió como mayor del 4º Batallón de Caçadores, con el que llegó al asedio de San Sebastián. Si nos fijamos en sus condecoraciones, veremos que tiene la Medalla de Oro por la batalla de Salamanca, y la Medalla General por Servicios con las barras de Fuentes de Oñoro, Ciudad Rodrigo, Badajoz, Vitoria, San Sebastián, Nivelle y Nive. También fue condecorado con la Orden de Caballero de la Orden de la Torr y la Espada, máxima condecoración que se otorgó a los oficiales británicos que mandaron distinguidamente unidades lusas.
En Fuentes de Oñoro fue herido al atravesarle una bala la mano el 3 de Mayo de 1811.
Ficha del Oficial Peter Adamson en el listado Chalis.
El año 1817 emigró a Canadá junto a su hermano y compró 200 acres de tierra cerca de la ciudad de Toronto. Su casa, terminada de construir en 1820 fue llamada primero Toronto House, y más tarde Thorne House. Se estableció definitivamente en esta propiedad en 1821. Su vida como terrateniente fue fructífera, llegando a tener en su posesión más de 20.000 acres de tierra.
Fue un hombre con gran poder e influencia en la comunidad de Erindale, siendo autorizado a formar bajo su mando el 1º Batallón Provisional de la Milicia para salvaguardar los intereses de la corona en esos territorios. Corría el año 1838, y fue nombrado coronel al mando de esos 300 hombres.
Por todos estos detalles fue recompensado con el título de “Honorable”, aunque siempre lo conocieron con los apodos de “El Coronel” o “El General”. Fue el fundador de dos pueblos, Erindale y San Pablo (Norval).
En 1848 fue ascendido a General de Brigada, graduación con la que terminó sus días en 1865. Está enterrado en la iglesia anglicana de San Pedro, situada en Erindale, bajo una lápida decorada con el escudo familiar y la lista de batallas en las que participó.